Debido a que está suspendido, Mauro Zárate se ubicó en la curva Norte junto a los hinchas de Lazio y vio la derrota de su equipo ante Bari. El argentino Sergio Almirón a los 51 y el hondureño Edgar Alvarez a los 64 marcaron los goles de Bari, ante la frustración de los aficionados que fueron en masa a alentar al equipo lazial, que ahora tiene debajo suyo a Livorno, Atalanta y Siena.
Lazio perdió una gran ocasión a los 72, cuando el arquero Jean Gillet le atajó un penal a Aleksandar Kolarov. "La tabla realmente da miedo", admitió el DT Edy Reja, mientras que el capitán Massimo Rocchi confesó que siente "verguenza", pues el equipo tuvo hoy a 45.000 hinchas que fueron al estadio a dar aliento. Uno de ellos, fue Zárate. Aunque seguramente desconoce quiénes son los Irriducibili, un grupo ultra que se considera derechista y nacionalista. "Semper avanti, semper fideli" ("Siempre adelante, siempre fieles") es el lema de una hinchada en la que no faltan las esvásticas, el saludo romano y los abucheos que imitan sonidos simiescos cuando la pelota la lleva un jugador negro.
3 comentarios:
Pura inconsciencia la de Maurito.
Saludos
Flor de boludo eh!
Que se dedique a ayudar a el equipo dentro de la cancha, porque si sigue asi la Lazio se va a la B
Saludos
informesdeseleccion.blogspot.com
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